Culpable o no Luis Miguel este viernes protagonizó uno de los conciertos más esperados del verano cordobés. Uno de los artistas más consagrados e icónicos de la canción mexicana aterrizaba directamente desde el otro lado del charco para dar comienzo en nuestra ciudad a una gira que le hará recorrer gran parte del territorio español.
El apodado como ‘El Sol de México’ ofreció un espectáculo que recopilaba los grandes éxitos de su carrera, rendía homenaje a sus mejores compositores y dictaba sentencia sobre la increíble conexión que siente el público con todos estos temas interpretados por su voz.
A base del gran carisma que le caracteriza, sus bailes enérgicos y sensuales, una banda de músicos excepcionales y una voz cuidada al más mínimo detalle, el mexicano dejó al público cordobés encandilado con su presencia y muy lleno de Amor (Amor, amor, amor).
“La incondicional” marea de fans con la que Luis Miguel se ha haciendo a lo largo de tantos años de una muy exitosa carrera, se encargó de llenar uno de los recintos más icónicos de la ciudad de su pareja, Paloma Cuevas, para recibirle por todo lo alto y corear cada una de las míticas e icónicas canciones que anoche sonaban en Los Califas. Fans de todas partes del territorio quisieron estar presentes en este primer contacto de la girac on España, así como muchas celebridades del panorama nacional e internacional que no quisieron dejar de formar parte de un momento tan especial. Pero sin duda, la asistente más especial fue su mujer, que pudo disfrutar del concierto en su propia tierra.
“No puedo vivir separado de ti y no puedo olvidar tu manera de hablar” cantaba Córdoba junto al Sol de México sintiendo esa letra como nunca, siendo consciente de que estaba presenciando una noche única e innolvidable.
También hubo espacio para demostrar su gran pasión y amor hacia los boleros y lo increíblemente bien que estos suenan en su voz. “Por debajo de la mesa”, “No Sé Tú”, “Como Yo Te Amé” o “Solamente Una Vez” fueron algunos de los temas que despertaron más de un suspiro, dejaron a más de uno totalmente boquiabierto y embelesado y arrancaron algunas de las que fueron sin duda las grandes ovaciones de la noche.
Más de 10 mariachis en el escenario
Pero sin duda, uno de los momentos más emocionantes vino de la mano de más de 10 mariachis en el escenario, cantando temas tan icónicos como La fiesta del mariachi, La Media Vueta o La Bikina, que además culminó por todo lo alto con una explosión de confeti con los colores de la bandera de México.
“No me puedes dejar así, quédate un poco más aquí” cantaba el de Méxic oacercándose cada vez más a la recta final del concierto mientras el público cordobés le devolvía dichas letras suplicando porque así fuera, porque aquello que le estaban cantando se hiciera realidad y así El Sol se quedará eclipsando la luna cordobesa toda la noche en un concierto histórico al que ninguno de los allí presentes quería poner el punto y final.
Y es que no le hizo falta ni hablar, solo no dejar de cantar y bailar en las casi dos horas de concierto para que el público estuviera desde el primer momento levantado de sus asientos, dándolo todo y manteniendo su energía al cien por cien de principio a fin con todas las canciones.
El concierto se despidió con una de las mayores ovaciones escuchadas en Los Califas.