Los casos de Valley fever, una infección causada por hongos, aumentaron de forma exponencial en California y los expertos la vinculan directamente con el cambio climático. En 25 años, la incidencia creció más del 1200%, al pasar de menos de 1000 reportes en 2000 a más de 12.500 el año pasado.
El Departamento de Salud Pública de California (CDPH, según sus siglas en inglés) reportó que los casos de Valley fever podrían superar el récord del año pasado. Esta infección se produce cuando las personas inhalan esporas del hongo Coccidioides, que crece de manera natural en el suelo. Según la agencia estatal, esta afección puede resultar mortal. Uno de cada diez pacientes hospitalizados muere.
Shaun Yang, director de microbiología molecular y genómica de patógenos en el Departamento de Patología y Medicina de Laboratorio de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA, por sus siglas en inglés), explicó a Sfgate que los inviernos relativamente húmedos y suaves de California permiten que la seta se desarrolle bajo tierra sin ser eliminada por las heladas. “Este tipo de condiciones meteorológicas son perfectas para que el hongo crezca”, indicó el experto.
En los últimos años, el cambio climático intensificó los ciclos de sequía y lluvia en el estado, lo que, según Yang, podría ser una de las principales causas del aumento de la enfermedad. Durante los períodos secos, las esporas se dispersan con facilidad cuando el polvo y la tierra se levantan por la construcción, la agricultura o el viento.
El científico señaló que su laboratorio solía registrar alrededor de un paciente con Valley fever al mes, pero actualmente ve con frecuencia hasta cinco casos mensuales. “Cuando los niños contraen formas muy graves de esta enfermedad, el impacto es devastador”, explicó. A su vez, advirtió que la infección puede diseminarse hasta los huesos y requerir tratamientos prolongados: “No podrán llevar una vida normal”.
Aunque algunas personas pueden desarrollar síntomas graves, Yang comentó que la mayoría no se enferma o solo presenta síntomas leves al entrar en contacto con las esporas. Como muchos casos no son diagnosticados, el experto estima que la cifra real de infecciones podría ser entre 10 y 18 veces superior a la reportada.
Por su parte, el Dr. John Galgiani, director del Centro de Excelencia en Fiebre del Valle de la Universidad de Arizona, indicó que las variaciones en el clima podrían expandir la presencia del hongo a nuevas regiones del país: “Hay estimaciones que indican que el cambio climático, o su efecto a largo plazo, aumentará la distribución de la infección en el oeste de Estados Unidos, hasta la frontera con Canadá”.
A su vez, aconsejó que las personas que consideren estar en riesgo y comiencen a presentar síntomas se realicen la prueba correspondiente. “La recomendación es que, si tienes neumonía en Bakersfield, por ejemplo, o en otros lugares endémicos, o si los visitaste, deberías hacerte la prueba”, dijo.
Según indicó Mayo Clinic, la Valley fever es una infección fúngica causada por dos especies de hongos Coccidioides, que se encuentran habitualmente en el suelo de determinadas regiones. Al inhalar las esporas, las personas pueden infectarse y desarrollar la enfermedad, que afecta principalmente los pulmones. Los casos leves suelen resolverse de manera natural, mientras que los más graves requieren tratamiento con medicamentos antifúngicos.
Los síntomas suelen manifestarse entre una y tres semanas después de la exposición y se asemejan a los de la gripe. Pueden variar de leves a graves e incluyen: