La industria automotriz cortó durante julio con la inercia hacia abajo que mantuvo durante el primer semestre: las terminales produjeron 44.336 vehículos, cifra que significó un repunte de 38,7% contra el mes anterior.
Y si bien la comparación de la producción de julio contra igual mes del año anterior sigue dando para abajo, esa caída se atenuó a 9,8%, mientras que en el acumulado del año la industria automotriz retrocedió 24,3% (261.172 vehículos, contra 345.031 del período enero-julio de 2023).
Hubo dos cuestiones detrás de este repunte: una mayor demanda de los mercados externos, en particular Brasil y Colombia, con exportaciones en julio por 28.330 unidades. Resultaron 35,7% más altas que el mes anterior y apenas 1,2% por debajo del mismo mes de 2023. Además en julio se comenzó a producir en serie el nuevo Peugeot 2008, en la planta que la automotriz Stellantis tiene en la localidad de El Palomar, con lo cual se incrementó la cantidad de modelos de la industria local (hoy son menos de 20, contando autos, SUVs y pick ups).
Las cifras fueron difundidas por la Asociación de Fabricantes de Automotores (ADEFA), que señaló que «aún con algunas paradas de planta, se experimentó un aumento de la cadencia diaria respecto del mes anterior. Acompañado por el inicio de la producción de un nuevo modelo, durante el mes pasado se registró un incremento del 14,3% y se superaron las 2.400 unidades diarias de producción».
Hace un mes, los directivos de ADEFA fueron recibidos por el ministro Luis Caputo, luego de que el Gobierno bajó los aranceles a la importación de autopartes para la fabricación, así como prorrogó el régimen que elimina las retenciones del 5% sobre las exportaciones incrementales a las registradas en 2020 (año en el cual casi no se exportó, a causa de la pandemia).
En aquella reunión, Caputo les confirmó la decisión de bajar en diez puntos porcentuales del impuesto PAIS, de 17,5% actual al 7,5% que estaba vigente hasta el 10 de diciembre. Y desde ADEFA hubo una media promesa (era el día 10 del mes) de que en julio se iba a incrementar la producción.
Ahora, con las cifras sobre la mesa, el titular de la entidad, Martín Zuppi, dijo que el objetivo de corto plazo de las empresas, tras siete meses consecutivos de caída, es “alcanzar lo más pronto posible la senda de crecimiento en términos anuales. En este sentido, las medidas que el Gobierno implementó en el último mes, tales como la eliminación de las retenciones a las exportaciones incrementales y la reducción de los plazos de pago al exterior, sumado al resto de medidas implementadas, son de vital importancia para el sostenimiento de sector”, agregó Zuppi, a través de un comunicado.
Pero además, el titular de ADEFA planteó que desde las terminales necesitan atraer inversiones en vehículos híbridos o eléctricos. “Uno de los grandes desafíos que se presenta para nuestro sector, en el mediano plazo, es el de contar con las herramientas necesarias para atraer inversiones en nuevas motorizaciones. Es una tarea en la cual estamos trabajando en medio del proceso de transformación por el que atraviesa la industria a nivel global y con el fin de garantizar la sustentabilidad a largo plazo”, dijo Zuppi.
¿Qué herramientas? La entidad empresaria no mencionó medidas concretas, pero hay un reclamo en el aire desde que asumió el nuevo gobierno libertario: la baja de aranceles para la importación de vehículos híbridos y eléctricos que provengan desde fuera de los países del Mercosur. Esas unidades hoy pagan 35% de arancel, pero durante el gobierno de Macri fue habilitada una exención de tipo ambiental que «premió» con un arancel de 5% la importación «de extrazona» de autos de motor híbrido (combinan el motor a batería con el de combustión) y de 2% para los que son 100% eléctricos. Aquella exención arancelaria no fue renovada por el gobierno de Alberto Fernández.
«Esas medidas sirven para crear más mercado y mayor demanda«, señalaron en una de las automotrices.
En cuanto a las cifras, la exportación de los primeros siete meses del año fue de 155.169 vehículos, una caída de 14,1% contra los primeros siete meses de 2023. Las ventas internas a la red de concesionarias (vehículos tanto de fabricación local como importados por las terminales) totalizaron 33.043 unidades en julio, cifra similar a la del mes anterior (+2,2%) y levemente por debajo (6,8%) de igual mes del año anterior.
En cambio las ventas acumuladas siguen reflejando el importante bajón de comienzo de año: entre enero y julio fueron despachadas a las concesionarias 195.029 unidades, un 18% por debajo de los primeros siete meses de 2023.