El comisario Pablo Perrota, a cargo de la Comisaría de Sarmiento, fue allanado por orden judicial. El jefe policial fue suspendido y desarmado, mientras se lo investiga.
Un fuerte hermetismo rodea el caso que involucra al comisario Pablo Perrota, jefe de la Comisaría de Sarmiento, quien fue allanado la semana pasada por personal de la Brigada de Investigaciones de Comodoro Rivadavia.
Según trascendió, durante el procedimiento —realizado por orden judicial— se habrían secuestrado diversos elementos de dudosa procedencia, entre ellos dinero en efectivo, que pertenecerían a internos alojados en la comisaría de Sarmiento. La investigación se desarrolla bajo estricta reserva, publicó Crónica.
Fuentes del Ministerio Público Fiscal indicaron que aún no se realizó la audiencia de apertura de investigación penal para definir la situación procesal del jefe policial, quien podría enfrentar imputaciones por la presunta tenencia de bienes sustraídos.
En tanto, desde la Jefatura de Policía evitaron hacer declaraciones públicas. Sin embargo, trascendió que Perrota fue suspendido preventivamente de sus funciones, se le retiró el arma reglamentaria y se le inició un sumario interno.
Perrota había asumido la conducción de la comisaría de Sarmiento el 28 de diciembre del año pasado, tras haber desempeñado funciones en el Área Penitenciaria y en la Policía Comunitaria.
En medio del silencio oficial, también circulan versiones sobre posibles maniobras irregulares vinculadas al manejo de detenidos y presuntos pagos indebidos, hechos que podrían ampliar la investigación judicial en curso.