Las puertas de salida parecen estar más transitadas que las de arribo en el devaluado fútbol argentino. Y la situación no sorprende por el duro contexto social y económico que atraviesa el país desde hace años. Los clubes, además, necesitan vender para sobrevivir. Pero en el actual libro de pases se puede percibir cómo inevitablemente se están yendo los mejores de cada uno de los equipos para que regresen algunos pocos. Casi todos los futbolistas que se destacaron en 2023 se marcharon y la sensación es inequívoca: en 2024 tendremos un fútbol menos estético, aunque por suerte esto no quiere decir más aburrido y apático.
El fútbol argentino no es competitivo en materia económica: el poder del dinero se impone. Entonces, el elenco inglés Brighton, un club con muy poca historia en la Premier League y en Europa, le puede arrebatar, sin demasiado esfuerzo, a Boca a Valentín Barco, la última de las joyitas. Algo similar está atravesando Vélez: Bologna de Italia está a punto de ejecutar la cláusula de salida de 10 millones de dólares de Santiago Castro, su mejor futbolista en el último semestre. Un dato no menor: Barco y Castro comparten representante, Adrián Ruocco.
Nicolás De la Cruz. Foto: EFE/ Juan Ignacio RoncoroniEl jugador que más llenó los ojos de los espectadores en 2023 fue Nicolás De La Cruz, que se marchó de River para reforzar al coloso Flamengo de Brasil, que pagó los 16 millones de dólares de su ficha. La estadía del uruguayo en Argentina se prolongó sólo por su buena voluntad y por el cariño que le tomó al conjunto de Núñez. En este caso, la sensación es que el mediocampista se quedó un poco más de lo conveniente.
“La decisión de venir a Flamengo la teníamos tomada hace un tiempo con mi familia. El proyecto que me acercaron fue muy importante. También que me ofrecieron un contrato a muchos años, lo que me va a hacer ganar muchas cosas”, confesó De La Cruz.
Benjamín Rollheiser. Foto: EFE/ Demian Alday EstevezOtro de los que brilló en 2023 fue Benjamín Rollheiser. Al zurdo, que llegó a Estudiantes libre de River, le alcanzó con una buena temporada para que el Benfica de Portugal deposite la confianza en él: abonaron 9 millones de euros por el 90 por ciento del pase. Pero los portugueses no apuestan sólo por futbolistas consolidados, sino que también invierten en juveniles con proyección: se quedaron Gianluca Prestianni, de Vélez, a cambio de 11 millones de dólares. Al enganche de 17 años le firmaron un contrato por cinco temporadas.
Augusto Batalla. Foto: JUAN MABROMATA / AFPSan Lorenzo y Racing tampoco pudieron retener a sus figuras. En el Ciclón, el entrenador Ruben Darío Insua pidió con fuerza para que permanezcan Augusto Batalla y Jalil Elías, pero el arquero emigró al Granada de España y el mediocampista a Johor de Malasia. En la Academia, Aníbal Moreno cumplió su deseo de salir y firmó con Palmeiras por 4 años y medio.
Los intentos de los equipos por reforzarse también encuentran trabas que se desprenden de lo económico. Talleres de Córdoba recibió sondeos de River y de Boca por el talentoso Rodrigo Garro, pero los dólares de Corinthians de Brasil pudieron más que los tentadores escudos. El zurdo se fue por algo más de 5 millones, pero lo primordial fue el contrato por 4 años que firmó con el Timao.
A Pedro De la Vega también lo tentaron los grandes del país, pero el Pepo armó las valijas y partió rumbo a Estados Unidos: jugará las próximas cuatro temporadas en el Seattle Sounders de la MLS, que pagó 7.500.000 dólares por su pase.
Foto: JUAN JOSE GARCIA – ClarínUn párrafo especial merece Jaminton Campaz, tal vez el futbolista más carismático del último semestre. El colombiano, que enamoró a los hinchas de Rosario Central, se convirtió en uno de los jugadores más atractivos de observar para el espectador imparcial por su talento y por su naturalidad. Pero los seis meses de oro del extremo de 23 años lo confundieron y entró en conflicto con los dirigentes rosarinos, que ejecutaron la cláusula de compra del 50 por ciento del pase en 2.500.000.
Pero sucede que la otra mitad del pase y los derechos federativos le corresponden a Gremio de Porto Alegre. Campaz pide más plata para renovar con el Canalla. En el medio asoma River como pretendiente, mientras que los brasileños le reclaman que se sume a la pretemporada en Brasil.
En definitiva, así es la pintura de época del mercado argentino: sin mayores remedios se van los mejores y hay escasez de jerarquía.