Un antisocial, un rebelde, un inseguro. Así es el Napoleón que presenta Ridley Scott, con Joaquin Phoenix como centro incuestionable de atención.
Que lo es, hasta que deja de serlo.
Esta Napoleón de Ridley Scott se parece, lamentablemente, más a sus últimas producciones (Los Gucci, El último duelo), en el que el director de Alien y Blade Runner parece perder la brújula y tomar decisiones poco acertadas a la hora de qué es lo que desea privilegiar. Siempre contando con grandes intérpretes, Joaquin Phoenix es un personaje tan estoico como ambivalente y hasta desprotegido.
Y como a todo Napoleón le llega su Waterloo, también a Napoleón le llega su película de Ridley Scott.
Joaquin Phoenix volvió a trabajar con Ridley Scott, tras «Gladiador». Fotos Sony/UIPEl filme arranca en plena Revolución Francesa, cuando María Antonieta es guillotinada, ante la mirada de Napoleón -una licencia poética del guionista, evidentemente-. Y no, oficial de artillería por aquel entonces, Bonaparte no se acerca y le pasa la lengua a la guillotina como hacía el vampiro Pinochet en El Conde, de Pablo Larraín.
A la hora, tras salvar Toulón en 1793, poner fin a la Era de terror en 1794 y el golpe de Estado del que participó en 1799, llegamos a su coronación como emperador, en 1804.
Y todavía falta una hora y media.
El despliegue de las escenas de combate (son seis), de lo mejor del filme.Scott va mechando los problemas de alcoba con escenas de seis batallas, cuando en otra época hacía al revés. Hay momentos fuertes -no cuando hace el amor con Josephine como un perrito-: los ingleses le bajan a su caballo blanco de un cañonazo.
Todos los detalles
Son detalles, como pasarse una carta de Josephine por el cuello, jugar tirando piedritas en su despacho o dejar sin comer postre a quien le cuenta del engaño sexual de su esposa o mostrarlo llorando en su divorcio público. ¿Eso lo hace más empático? ¿Lo hace más humano y menos de bronce?
La película se empantana cuando corre la atención hacia los problemas de alcoba del emperador.Scott no cuenta nada nuevo, no hay personajes laterales, secundarios que expliquen o magnifiquen quién era el protagonista. Lo pone o mejor, lo expone al actor de Joker a decir frases o tener actitudes como las ya mencionadas, que más que construir empobrecen la visión del artista sobre el personaje.
El guion de David Scarpa (que escribió también el guion de Todo el dinero del mundo, de Scott) desvía la atención en el militar y la posa por momentos en Josephine.
Joaquin Phoenix es un estoico Napoleón, pero no tiene grandes líneas de diáogo para lucirse.Si bien hay cierta dinámica entre el cornudo que compone Joaquin Phoenix y la intrigante Vanessa Kirby, es esa misma extraña relación del emperador francés con Josephine lo que Scott privilegió, dejando en segundo plano su fuerte: las imágenes de confrontamiento épico, sea en Gladiador o Robin Hood y hasta en La caída del Halcón negro.
Es cierto que Napoleón dejó su batalla en Egipto para volver a Francia en cuanto se enteró de que Josephine le estaba siendo infiel. La relación es pasional, por momentos brutal y casi siempre manipuladora. Hasta se llega a afirmar que Napoleón no era nada sin Josephine, y sin su madre.
En un momento, los ingleses le bajan a su caballo blanco de un cañonazo.Cómo es contado el exilio de Napoleón en la Isla de Santa Elena, y la correspondencia epistolar que mantuvo con Josephine ya divorciado y con un hijo bastardo parecen alargar la trama en vez de nutrirla.
Vanessa Kirby (Fragmentos de una mujer, la princesa Margaret en The Crown) le pone como decíamos intriga a su Josephine, casi siempre en escenas de interiores. Scott orquesta escenas asombrosamente complejas en las batallas, tal vez la de Austerliz sea para recordar, pero donde tira toda la carne al asador es en la que Napoleón termina derrotado, Waterloo.
Es que éste es el Scott de Napoleón: opta por sacrificar un estudio psicológico del protagonista en pos de hacerlo humano. El espectáculo debe continuar, y por eso los combates son lo mejor de la película.
“Napoleón”
Buena
Drama / Acción. Estados Unidos, 2023. Título original: “Napoleon”. 158’. SAM; 13 R. De: Ridley Scott. Con: Joaquin Phoenix, Vanessa Kirby, Tahar Rahim, Rupert Everett. Salas: IMAX, Cinemark Caballito, Hoyts Dot, Cinépolis Recoleta, Showcase Belgrano y Norcenter.