El ex técnico de la Selección de Chile, Ricardo Gareca, se encuentra en un período de transición, a la espera de alguna propuesta futbolística que lo seduzca, para volver a ocupar el cargo de entrenador.
Gareca dialogó con Página/12 sobre su situación actual, y reconoció sus ganas de volver a trabajar en el país.
El ex delantero fue formado en Boca Juniors, debutando con este equipo en 1978. Pasó en 1981 a Sarmiento de Junín, donde se destacó como goleador, fue reintegrado a Boca en 1982, y permaneció en este club hasta 1984. Tras un breve paso por River Plate, llegó en 1985 al América de Cali y consiguió dos campeonatos, en 1985 y 1986. En 1989 retornó a Argentina para jugar en Vélez Sarsfield, club del que es hincha e ídolo, y finalizó su carrera futbolística en Independiente, con el que logró la Supercopa Sudamericana 1994. Además, es el segundo entrenador más exitoso en la historia de Vélez Sarsfield, con cuatro títulos locales.
Su carrera continuó luego por la Selección de fútbol de Perú, desde 2015 hasta 2022, con la que alcanzó el tercer lugar en la Copa América 2015, cuartos de final en la Copa América Centenario, la clasificación para la Copa Mundial de 2018 después de 36 años de ausencia, subcampeonato en la Copa América 2019, el cuarto lugar en la Copa América 2021 y el repechaje AFC-Conmebol por la clasificación para la Copa Mundial de Fútbol de 2022, además de la mejor ubicación en el ranking FIFA en su historia (puesto diez). Los malos resultados en el conjunto chileno desembocaron en su salida.
-¿Cómo estás viendo la actualidad del fútbol argentino?
-El fútbol argentino nunca va a dejar de ser competitivo, porque aún habiendo crisis en cualquier época, siempre ha sido un fútbol competitivo, por sus jugadores, por la característica, por los equipos. Pese a las dificultades que tiene, este es un momento difícil también, porque hace tiempo que no hay equipos que peleen torneos internacionales, o que ganen torneos internacionales. Eso habla y tiene que ser un llamado de atención, como para ver cómo se organiza uno, y los equipos tengan la posibilidad de siempre estar competitivos y que puedan hacer lo que siempre hizo el fútbol argentino, conseguir logros importantes. Pero no solamente del medio local, sino también a nivel internacional, que es lo que enfocan muchos equipos. Entonces, yo creo que está atravesando una situación de revisión, más que nada, donde toda aquella gente que está encargada, bueno, necesita abrir los ojos para que esto mejore. Después, siempre el futbolista argentino es un jugador muy competitivo.
-¿Te gustaría volver a dirigir en el país?
-Me gustaría volver al país, sí. Estuve muchos años afuera, bueno, tuve un lapso en Vélez, muy breve. La idea es que salga algo lindo y tratar de establecer una continuidad en el fútbol argentino. La verdad que siempre el fútbol argentino es muy apasionante, siempre, como te dije antes, es muy competitivo. Y bueno, la posibilidad de poder llegar a dirigir, la considero, de volver a dirigir acá en el fútbol argentino.
-¿Qué balance hacés de tu paso por la Selección de Chile?
-Arranqué bastante bien, pero después en la Copa América había grandes expectativas por lo previo. No me pude afianzar. Mejor dicho, no pudimos. Todo lo bueno que se había alcanzado previamente en la Selección, no pudimos trasladarlo en la Copa América. Y el arranque de la eliminatoria fue muy malo, entonces, tengo que llegar a la conclusión de que no pude plasmar lo que quería en los muchachos. Para lograr una continuidad, para lograr un afianzamiento en resultados, en rendimiento. Y eso me lleva, lógicamente, en este caso, a salir de la Selección. Es un país hermoso, muy lindo, me trataron muy bien, pero lamentablemente los resultados no se dieron y me tuve que ir.
-¿Qué opinión tenés sobre la llegada de capital privado en algunos clubes del país?
-Primero creo que las Sociedades Anónimas en el fútbol no hay que generalizarlas en todo. Por ahí alguna institución se quiere privatizar, después otros clubes lo manejan bien con los socios, hay clubes que no le veo ninguna posibilidad de privatización. En este caso, sobre todo las grandes instituciones que convocan tanto, pero hay otras que por ahí los pueden llegar a favorecer, eso es tan relativo que la verdad estoy abierto. Un está abierto a todo lo que tenga que ver con un crecimiento en el fútbol, con un desarrollo, con un crecimiento. No estoy ni para un lado ni para el otro, no estoy ni que sí ni que no, más que nada, mi pensamiento siempre fue abierto a que mejore la situación, a que de pronto todo vaya mejorando. En ese aspecto no tengo una opinión determinada, o no soy terminante en esa clase de opiniones.
-¿La gestión del fútbol argentino te gusta?
-A la AFA la veo bien a nivel nacional, creo que la Selección Argentina está bien gestionada por sobre todas las cosas. En ese aspecto me parece que hay una gran gestión, porque la veo no solamente firme en resultados, siempre la consecuencia de un resultado deportivo tiene que ver no solamente con lo que sucede en el campo de juego, sino también en la forma de gestionar. Y en ese aspecto me parece que todos arrojan un saldo muy positivo, tanto dentro del campo de juego como afuera. Después habrá que revisar bien las competencias de los clubes, y cómo están los clubes, cómo está el campeonato local. En eso sí habrá que hacer una revisión, yo creo que en cuanto a eso, sí me parece que se permite una revisión, no creo que haya una conformidad en general o hay cosas para mejorar más que nada. Creo que más que nada la definición exacta es que hay que mejorar lo que se refiere al campeonato interno, lo que se refiere a todo eso para que los equipos mejoren, para que los campeonatos sean mejores, me parece. Y los clubes así puedan estar cada vez más consolidados, habrá que analizar qué es lo que se debe hacer en ese aspecto.
-¿Tenés algo pendiente para cumplir en el fútbol?
-Ya tengo una edad que me gusta vivir más el presente, qué sé yo, estoy más enfocado en el presente que en todo lo que tenga que ver con sueños. Nunca dejo de ver o de visualizar dónde me puedo llegar a encontrar. La situación mía, pero he aprendido con el tiempo más que nada de vivir el presente, a tratar de ver lo que me salga, el desafío que me salga, a proyectarme en ese desafío, porque a veces me he hecho ilusiones de estar en algún lugar o de ir hacia algún lugar y por ahí no se me dio. Entonces, como muchas veces suceden ese tipo de cosas y como me ha pasado ese tipo de situaciones, entonces prefiero vivir más la realidad y lo que me salga. Más que nada un poco estoy en esa etapa.
-¿Ves mucha diferencia entre el fútbol europeo y el sudamericano?
-Es innegable que al irse cada vez más jóvenes los jugadores, y no tener la posibilidad de afianzarse en sus respectivos equipos acá en Sudamérica, cosa que los equipos se hagan fuertes y que puedan contar con sus figuras en los eventos internacionales, lógicamente que los equipos europeos o el fútbol europeo se fortalece cada vez más. Y el fútbol sudamericano se debilita, es algo para revisar, porque es importante que revisemos la historia del fútbol sudamericano y sobre todo la historia del fútbol argentino. Y yo creo que la historia es ampliamente favorable al fútbol argentino. Hay que tener cuidado en eso, si bien uno no desconoce la realidad y la situación es económica, pero como te dije es motivo de revisión el ver que equipos que antes teníamos, campeones de Copa Libertadores, campeones del mundo y todo.
-¿El problema sigue siendo económico?
-A las instituciones les cuesta más contar con sus jugadores, mantener a sus jugadores, mantener a sus figuras. Y bueno, eso implica que los equipos empiecen a perder la fortaleza que tienen que tener para distintas competencias. Sobre todo en la Copa Libertadores, un Mundial o este Mundial de Clubes. Entonces, ese sí es motivo de revisión, porque es tan grande la historia del fútbol argentino que uno no puede quedarse solamente que es un tema económico. En definitiva, pareciera que eso es lo que impera solamente, y el tema económico hace que de pronto pierda de vista la historia, la grandeza del fútbol argentino. La grandeza del fútbol sudamericano, porque no solamente estamos hablando del fútbol argentino. Fijate que Peñarol y Nacional, esa historia de los uruguayos que han dejado de figurar totalmente. Entonces, esto es algo que nos llama la atención, en Paraguay, Olimpia, por ejemplo, eso sí es motivo de revisión.
-¿Los brasileños son los únicos que terminan prevaleciendo?
-Los brasileños por ahí mantienen una determinada fortaleza, aunque lógicamente que después, cuando van a la competencia de título mundial, habría que ver. Ahora han tenido una mejor participación que nosotros en este Mundial de Clubes. Nosotros con dos equipos nada más que nos representaron, pero la grandeza del fútbol argentino, viste, te lleva a que hay instituciones que hace años que no figuran más a nivel internacional, siendo el caso de Independiente como el denominado «Rey de Copas». Entonces eso habla un poco en lo que estamos sumergidos, y en lo que hay que revisar bien para que nuevamente el fútbol argentino vuelva a estar fortalecido.